La industria avícola, así como sus productos, son una de las actividades pecuarias más importantes del país. Además de su notable aporte a la economía nacional, productos como el huevo o la carne de pollo se posicionan como piezas angulares en la dieta cotidiana de los mexicanos.
En este sentido, múltiples fuentes constantemente reafirman el papel preponderante que la avicultura tiene en México. Recientemente, Rabobank, una entidad financiera holandesa, nombró a la industria avícola mexicana como una de las de mejor rendimiento tras la pandemia por COVID-19. Por otro lado, el Centro de Estudios para el Desarrollo Rural Sustentable y la Soberanía Alimentaria (CEDRSSA) de la Cámara de Diputados nombró a la industria como “un sector fundamental de la producción de la alimentos” debido a que presenta la mayor tasa de crecimiento dentro de las actividades agrícolas, pecuarias y pesqueras.
Ante ello, es importante reconocer cuando la avicultura continúa mostrando indicadores que mantengan su notable valor, como lo recientemente compartido por la Unión Nacional de Avicultores (UNA).
Incremento en la producción de carne de pollo
De acuerdo con el organismo anteriormente mencionado, al cierre del año pasado, la producción mexicana de carne de pollo alcanzó los 3.5 millones de toneladas. Esto significa un aumento de 1.1% respecto a los datos del 2019.
En cuestión económica, el procesamiento de este producto sumó un valor de $121, 332 millones; lo que representa un 54.4% de la cotización total del desempeño de toda la industria avícola en ese año, el cual alcanzó los $187 mil 872 millones.
La carne de pollo en el Producto Interno Bruto
La notoriedad de la avicultura también se encuentra en el papel que juega en la economía nacional. En 2019, la avicultura mexicana aportó 0.89% al Producto Interno Bruto (PIB) total, mientras que representó el 28.01% del PIB de las actividades agropecuarias y el 36.6% del PIB pecuario.
En el 2020, continuando con el reporte de la Unión Nacional de Avicultores, la producción de carne de pollo tuvo un rol importante, pues aportó el 0.53% del PIB total en México, 10.29% en el agropecuario y 24.4% del Producto Interno Bruto pecuario.
Principal proteína de origen animal
Además de su participación positiva en los indicadores económicos de la industria, así como del país en general, la carne de pollo también se ubicó en el primer lugar en comparación con otros productos proteínicos de origen animal.
Con una representación del 38.2% en la actividad ganadera nacional, la producción de carne de pollo se coloca como un referente de la industria. Después de ella le siguen la leche de vaca con un aporte de 18.8%; el huevo, con 17.02%; la carne de res, con 16.07%; y en el último lugar se encuentra la carne de cerdo con un aporte de 8.58%.
Principales regiones productoras de carne de pollo
La UNA reporta que las principales regiones productoras de carne de pollo en México durante 2020 fueron Veracruz, Aguascalientes, Querétaro, la zona de La Laguna (Coahuila y Durango) y Jalisco. En conjunto, en estas zonas del país se concentró el 50.8% de la producción en el país, lo que equivale a 1.8 millones de toneladas, aproximadamente.
Otros estados que tuvieron un notable aporte a la producción cárnica durante el año pasado fueron Puebla, Chiapas, Guanajuato, Yucatán, Sinaloa, Estado de México, Nuevo León, San Luis Potosí, Morelos, Hidalgo y Nayarit.
En cuestión de la comercialización de pollo en el país durante el año pasado, la UNA reporta que tuvo el siguiente desglose:
- Vivo – 37%
- Rosticero – 37%
- Piezas – 11%
- Mercado público – 9%
- Supermercado – 3%
- Productos de valor agregado – 3%%
La producción de carne de pollo en México a nivel internacional
Las positivas cifras compartidas por la Unión Nacional de Avicultores le otorgan un lugar destacado a la producción de carne de pollo mexicana en el ámbito internacional. Según la organización, nuestro país ocupó en 2020 el sexto lugar, detrás de países como Estados Unidos, China, Brasil, Rusia e India, los cuáles tuvieron una producción de 19.8, 13.8, 13.6, 5.1 y 4.9 millones de toneladas, respectivamente.
Consumo de pollo en México
Gracias a las cifras anteriores, podemos afirmar que la producción de carne de pollo es un referente de la actividad pecuaria nacional. Sin embargo, los enormes esfuerzos de producción no tendrían un propósito si el pollo no fuera una de las principales proteínas en la gastronomía mexicana.
Debido a que se tratan de alimentos accesibles, saludables y de mucho valor nutricional, los productos avícolas forman una parte esencial en la dieta del mexicano promedio y eso se nota. La carne de pollo tuvo durante el año pasado el primer lugar en el aporte proteínico del sector pecuario, con una participación del 38.9%, seguido por el huevo con el 16.5%.
Adicionalmente, el Consejo Mexicano de la Carne (Comecarne) señaló que en el año pasado, en México se consumieron 51 millones de toneladas de carne. De este total, 49% se atribuye al consumo de carne de pollo, es decir 4 millones 400 mil toneladas aproximadamente.
Estos indicadores refuerzan la preferencia de los consumidores en el país por la carne de pollo. En conjunto con otros productos de la industria avícola, como el huevo, se trata de alimentos con múltiples cualidades atractivas que los vuelven líderes del sector pecuario. Tanto la carne de pollo como el huevo son productos sumamente frescos, cercanos a los puntos de venta disponibles para el consumidor con precios accesibles, versátiles en su preparación y con un aporte nutricional sumamente valioso.
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